Ilusion, Fuerza, Indescriptible, Alta Montaña, Sufrimiento, Mar, Acantilados, Arena fina,
Alegria y Sonrisas, Kilómetros, Zapatillas, Mochila, Agua y Otras bebidas espirituosas, Aventura, Magia, Naturaleza, Senderismo ....
Este año nos propusimos 21 dias sin pasar por Madrid, ciudad en la que vivimos y amamos pero que satura y de que modo. Asi que nuestra propuesta fue irnos al Norte parte de nuestras vacaciones, con una mochila a la espalda, mucha ilusion
y miedo, sin nada preparado, con algunas indicaciones y a la aventura.
Unicamente sabiamos que empezariamos a andar en Bilbao, y que 8 dias despues volveriamos desde Oviedo ... con lo que donde acabaramos el septimo dia tendriamos que desplazarnos hasta Oviedo para dormir y coger el tren de vuelta.
Asi que esto no es mas que un breve resumen de una historia alucinante, de una magica aventura, recorriendo el norte de España, conociendo sus pueblos, sus gentes y por supuesto su gastronomia.
Etapa 1
Bilbao - Portugalete:
Tras llegar a Bilbao lo primero que hicimos fue recorrer esa maravillosa ciudad, sus atracciones principales, un paseo por la ría, y el casco histórico degustando sus tapitas y con el animo de volver algún año a disfrutar de la semana grande de Bilbao, pues estaban montando todo y tenia pero que muy buena pinta.
Y de allí a Portugalete, donde pudimos disfrutar de su gente, nos encanta el Pais Vasco, el trato excelente, empezando por el dueño de la pension que nos mostro un video de cómo salir de la ciudad para no perdernos.
Luego recorrimos esta ciudad, su playa y su puente colgante
y encima comenzaban sus fiestas, asi que vivimos el chupinazo y sus fiestas canallas, sus garitos y su música espectacular y que ambientazo había por todo el pueblo … ahhh y por supuesto … la primera pulserita del camino.
Etapa 2
Portugalete – Islares
Amaneces con la resaca de las fiestas, tu con tu mochila mientras el gentío avanza a los encierros, y de ahí al bidegorri, un camino rojo de 12 km que nos llevaría a Pobeña y su playa de la Arena.
Allí desayunamos el mejor pincho de tortilla de estas vacaciones mirando al mar en el bar Waitaki. Según caminas vas recorriendo la costa y eso es increíble.
Antes de llegar a Islares teníamos parada en Castro Urdiales … y coño también estaban en fiestas, asi que al llegar nos hidratamos a base de cervezas y vinos en la fiesta del marmitako, donde nos invitaron a los aperitivos con un ambientazo que te costaba echar a caminar de nuevo.
Aun asi … llegamos a Islares, pueblo pequeñito, pero con una playa impresionante donde vimos atardecer tirados en una colina frente al mar (hablan del atardecer de Mikonos … El de Islares no tiene mucho que envidiarle).
Encima dormíamos en un camping, donde nos dieron un modulito para dos personas … muy chulo la verdad. Creo que esta ha sido una de las etapas mas bonitas que hemos hecho nunca.
Etapa muy larga pero donde respondimos bastante bien, buen ritmo y mejor animo.
Etapa 3
Islares – Santoña
No puedo describir el amanecer al lado de la playa con unas vistas para recordar toda la vida y con un viento bastante fuerte para despertarte.
De camino a Santoña atravesamos el barrio de la Magdalena... bienvenido a la comarca de los hobbits.
Y antes de llegar, atravesamos Laredo donde nos hidratamos con unas cervecitas y unas tapas de rabas y de queso.
Ya solo queda recorrer todo el paseo playero de Laredo camino del puntal donde cogeríamos un barquito muuu chulo que nos cruzaría hasta Santoña. (Lastima que Laredo haya permitido construir tanto edificio feo al lado de la playa).
En Santoña duchita en el albergue donde nos permiten dormir en una tienda de campaña al aire libre y no nos lo pensamos … increíble.
Solo queda paseíto por el pueblo, ver atardecer viendo la playa desde un cutre bar con botellines baratos,tirados en el suelo del paseo marítimo mientras a nuestro lado paseaban elegantes los lugareños, despues cenita y para la tienda de campaña.
Etapa bastante mas corta que la anterior, donde sin embargo el ritmo fue peor, y sufri bastante, por momentos me vine abajo, aunque ahí apareció Laura como durante toda la excursión para cuidarme y animarme, y para detenernos cada vez que necesitaba descansar. Gracias
Etapa 4
Santoña – Santander
Etapa de dureza extrema, de las mas largas que hemos hecho nunca, y con muchísima subida, y sin embargo creo que es la etapa mas bonita que hemos recorrido.
Sales de Santoña pasando la cárcel monumental del Dueso, y te encaminas hacia la playa de Berría amaneciendo, y te topas con el alto del Brusco … joooooder que subida, además de dura es peligrosa, de difícil acceso, complicada ...
Pero es que las cosas buenas se hacen de rogar, porque al coronar tienes a la derecha Santoña y la playa de Berria con el sol saliendo, y a la izquierda Noja y la playa del Trengandin … la vista es indescriptible, pero os aconsejamos a todos visitar este tramo alguna vez.
Tras bajar el Brusco, recorrimos por la arena la playita hasta Noja, es un momentazo.
Pasado Noja, tomamos el aperitivo a base de langostinos y mejillones en Guemes … ya va quedando menos.
Pero en este momento nos alejamos de cualquier señal de camino o ruta, porque nos apetece sufrir y disfrutar las playas de langre y loredo, asi que nos subimos a sus interminables acantilados y los recorremos con calor, dureza pero con una alegría y paz increíbles.
Al fin divisamos la playa de Loredo, solo hay que llegar a Somo y coger el barco hasta Santander, solo son 4km, pero nos quitamos las botas y andamos por el agua, no podemos describir la sensación tras 40km, el agua fría en los pies, la arena y Somo cada vez mas cerca, y los demas bañistas mirandonos al pasar entre ellos, incluso alguno se acerca a preguntarnos, incluso alguno nos llama locos y nos pregunta el por que no cogimos un autobus o una bicicleta ... jajajajaja.
El barco es reparador y apareces en Santander con una sonrisa, buscando la ducha del albergue y los pinchos cántabros, aquí degustamos dos supervinos y raros D.O. Calatayud y Ribera del Queiles.
Etapa 5
Santander – Santillana
En esta etapa echamos de menos las buenas vistas (nos han acostumbrado muy mal). Demasiados km, que unidos a los de la etapa anterior y a algún error en los mapas e indicaciones y sobretodo al calor, hacen de la etapa algo muy duro. Eso si, en medio de este desierto y cerca de Cudon, nos encontramos un oasis
en forma de sombrillas rojas de amstel … el bar La Cantera (lo prometido es deuda). Gracias por tener este bar, por ser tan amables y por este trato tan calido … y gracias a todos los bares.
Llegada a Santillana, cena de lujo y anochecer en este villa tan mágica, por cierto a estas alturas ya llevamos 5 pulseritas … suma y sigue.
Etapa 6
Santillana – San Vicente de la Barquera
Desayuno en Santillana, aperitivo en Comillas y atardecer y cenita en San Vicente …. Que mas se puede pedir?
Por fin en esta etapa nos acompaña la lluvia, solo durante 5km, pero se la echaba de menos, sobretodo en esta zona.
Ademas de estos pueblos tan famosos, esta etapa tiene innumerables pueblos a visitar … La iglesia ….
La etapa acaba con unos chipirones a la plancha en el puerto.
Gracias a la pension Arenal y la confitería Carma, por vuestra amabilidad, y por vuestro trato a los caminantes y ese maravilloso desayuno al que nos invitasteis.
De esta etapa maravillosa nos quedamos con la emocion que sentimos ambos al divisar en la distancia el puente de San Vicente, porque fue una etapa dura, por la lluvia para alguno, por problemas fisicos para otro, y porque lo conseguimos, incluso cuando hubo momentos en que pensamos en parar en Comillas.
Etapa 7
San Vicente de la Barquera – La Franca
Gran despertar viendo San Vicente y el parque natural de Oyambre, estamos ya casi en el limite con Asturias,
asi que nos tomamos la ultima cerveza cántabra en Unquera
y subimos sin perdida y con mucha ilusión hacia la mágica e impresionante playa de la Franca, rio y mar juntos en una foto que no se nos olvidará nunca.
El dia acaba con una cena inesperada, porque habíamos ido a tomar unas cervezas y acabamos con los parroquianos del pueblo tomando botellas de sidra y langostinos gigantes …. Que descubrimiento “La Casa de Abajo”.
Aquí dormiremos en otro camping pegados a la playa, en una casita de madera para dos personas, que lujo.
Etapa 8
La Franca – Llanes – Oviedo
Ultima etapa de este año, tenemos que dormir en Oviedo, asi que nos encaminamos a Llanes donde cogeremos un bus para Oviedo. Etapa final, tristes por ello, pero muuuy felices por lo vivido, y encima que etapa, que vistas de Llanes a 5km de llegar, pero aun queda el alto del Cue y la subida a la Ermita del Cristo ….
Uffff muuuy duro, pero merece la pena. Antes hemos podido disfrutar de Bufones de Arenillas, huecos en la montaña que hace el mar.
La llegada a Llanes nos hace un guiño al futuro con un cartel a la entrada que dice … Llanes – Ribadesella … esperamos que sea muy pronto. Al entrar en Llanes, preferimos no ver nada del pueblo, lo dejamos para el año que empecemos allí.
Asi que nos sentamos en dos terracitas, con una racioncita de mejillones y un jarrel de cerveza, y con otra racion de bocartes riquísimos y la botella de sidra de rigor … y para Oviedo donde visitamos la ciudad y bebimos sidritas … Que la sed es muuuu mala.
Momentazo alli en una vieja terraza frente a la catedral, donde acompañados de un tercio fresquito ibamos redactando y recordando todo lo vivido.
Etapa 9
Oviedo – Almeria
Ahora tocaba el sur, sus pueblos y sus playitas. Empezamos por Almeria, ciudad a la que llegamos en sus fiestas, y donde con una playa kilométrica y muy limpia, y un apartamento pegadito al mar.
Que tapas, espectaculares … Con cada caña y bien elaboradas, en nuestro ranking quedan las almejas a la plancha, el pulpo frito y el salmorejo …y eso que fue complicado, ya que en los bares te dan la carta de las tapas, y es complicado elegir entre tanto lujo gastonomico.
Y luego toco ruta por muchísimos sitios, San Jose, Carboneras, Aguamarga, Las Negras, Isleta del Moro (precioso e increíble pueblo), playa de los Muertos, el playazo de Rodalquilar, Vera ….
Y para acabar pasamos unos días en Mojacar … Buen hotel y el pueblo es bonito pero esta lejos y con gran subida, aunque nos ayudaba a bajar la cenita y a no olvidar el camino realizado.
Destacar El Loro Azul, quizás el pub mejor decorado que he visto nunca, y con música en directo, una pasada.
En estos días disfrutamos de la tranquilidad de las playas, de los paseítos y los helados, de jugar a las palas, saltar olas y hacer muchos puzles japoneses (que vicio), del nudismo jajaja y por supuesto de la Estrella de Levante, espectacular cerveza de aquí, y que nunca habiamos probado.
Ahhh y tuvimos tiempo para acercarnos a Antas a 10km de Mojacar a una carrera popular que Laura ganó jeje.
Pues eso es todo, ha sido uno de los mejores veranos que hemos tenido, y no sabria con que momento quedarme de todo lo vivido, pero creo que la duchita al finalizar cada etapa, y esa primera cervecita o sidra donde escribíamos lo acontecido ese dia era genial, aunque para mi, era la foto cuando andábamos y veía a Laura delante de mi, con la mochila cargada, con los gemelos marcados, y poniendo el ritmo de la marcha … la verdad que me encanta.
